Brasil nos recibe con música, fútbol y carnaval, pero también con muchas playas de ensueño. Haremos un recorrido por las mejores playas del sur de Brasil que no te podés perder.
Búzios
Comenzaremos por la playa que se encuentra más al norte de nuestro listado de mejores playas del sur de Brasil. Está cerca de Río de Janeiro y es fácil llegar desde este aeropuerto. Si bien es muy popular desde siempre entre los argentinos, Búzios se hizo conocida a nivel mundial tras una visita de Brigitte Bardot en los años ’60, cuando estaba de novia con un músico brasileño. A partir de ese momento, empezó a establecerse como un balneario de lujo, tal es así que se la llama la Saint-Tropez de Brasil.
En Búzios encontrarás playas para todos los gustos. Desde aguas más frías hasta más cálidas, debido a las distintas corrientes marinas que recibe. Desde más tranquilas a más bravas, donde ir con la familia en el primero de los casos, o practicar surf en el segundo. Más concurridas por estar más cerca del centro de la ciudad, o más vírgenes por estar algo más alejadas y escondidas. Algunas de las mejores playas de Búzios son: Tartaruga, Praia do Canto, Praia dos Ossos, Praia da Azeda y Praia João Fernandez en el norte de la península y Praia do Forno, Ferradura, Ferradurinha y Geribá por el sur.
Río de Janeiro
No es un secreto que Río de Janeiro está entre las mejores playas del sur de Brasil y que te recibirá con todo su color, música y alegría. Las dos playas más conocidas son Ipanema y Copacabana, donde podrás disfrutar de todo el encanto carioca. Ahí se puede hacer de todo, desde surf y otros deportes o juegos acuáticos, hasta tirarse al sol en la arena mientras escuchás a los vendedores ambulantes o a un grupo de muchachos jugando al futevoley (una mezcla entre vóley y fútbol). La ciudad de Río tiene muchas más playas, como ser las de Leblón o Botafogo, que son ideales para disfrutar en familia.
Lo bueno de Río, la “ciudad maravillosa”, es que podrás dar un paseo en sus barrios más emblemáticos, Santa Teresa y Lapa, a la vez que perderte en las angostas calles de las favelas. De todas formas tenés que tener en cuenta que todo viaje a Río de Janeiro no está completo si no se sube al Cristo Redentor y al Pan de Azúcar, desde donde tendrás las vistas más increíbles de la ciudad.
Camboriú
Es de las ciudades con mayor calidad de vida de Brasil y también de las playas más lindas del sur de Brasil. Imprescindible hacer una caminata por la avenida Atlántica, mientras observas los altos edificios que hay en su litoral y te adentrás en su gastronomía en algunos de los cientos de restaurantes.
Así como Río de Janeiro tiene su Cristo Redentor, Balneario Camboriú tiene su Cristo Luz, un monumento que vigila toda la ciudad desde las alturas. Y cuando se trata de diversión, esta ciudad cuenta con el Parque Unipraias, donde uno se puede pasear en teleférico, subirse al trineo de una montaña rusa y sentir la adrenalina tirándose de tirolesa. También está el Beto Carrero World, que es un parque de diversiones temático de los más grandes de América Latina. ¡No hay lugar para el aburrimiento!
Pero a Camboriú vinimos a disfrutar de sus playas, así que vamos a ellas. La más conocida es Praia Central, que es la que queda más a mano por encontrarse justamente en el centro de la ciudad. Además es la más popular. Si buscás algo un poco más agreste, menos concurrido y más paradisíaco, podés recorrer la carretera Interpraias y conocer Laranjerias, Taquarinhas, Taquaras, Pino, Estaleiro y Estaleirinho.
Bombas y Bombinhas
Si bien los dos pueblos más conocidos son Bombas y Bombinhas, la península de Portobelo ofrece una variedad de balnearios con las playas más lindas del sur de Brasil. Tales son los casos de Mariscal o Canto Grande, con playas más extensas de fina arena, donde se realiza variedad de deportes acuáticos gracias a la fuerza del oleaje, y se practica la pesca.
En Bombas y Bombinhas las playas son más idílicas, de aguas cálidas y tranquilas, donde se puede realizar esnórquel y buceo. Ambas tienen avenidas paralelas al mar, llenas de hoteles y restaurantes donde poder disfrutar de un buen plato de pescado. La diferencia entre las dos ya se puede ver en su nombre, las playas de Bombas son más extensas que las de Bombinhas, pero si vas a esta zona de Brasil, podrás pasear entre ellas por igual.
Florianópolis
Florianópolis cuenta con muchas de las mejores playas del sur de Brasil. Una parte de la ciudad se encuentra en la isla de Santa Catarina y la otra en continente, y se unen entre sí por dos puentes. Uno de ellos es el de Hercilio Luz que se ha convertido en uno de sus emblemas.
La isla no es pequeñita sino que tiene 54 kilómetros de longitud norte-sur con muchísimas playas increíbles y dos lagunas de agua salada donde se practican deportes acuáticos. Hay que dedicarle unos cuantos días (o unas buenas vacaciones) para recorrer Florianópolis, porque además hay muchísimo por hacer. Las playas del norte de la isla son las más visitadas como Jurerê Internacional, Canasvieiras o Ingleses do Rio Vermelho. Si te gusta practicar surf, te encantarán playa Joaquina y playa Mole.
Porto Alegre
Si bien Porto Alegre no tiene playas en sí misma por estar metida en continente, es la puerta de entrada a cientos de lagunas y playas extensas que están sobre el litoral. Quizás las playas gauchas (así es como se llama a los habitantes de Porto Alegre) no sean de las más lindas que verás en Brasil, pero son las más cercanas a Argentina si estás viajando en auto. Por su situación frente al océano, el fuerte oleaje se presenta ideal para aquellos que gustan de surfear las olas. Para el resto de deportes acuáticos como el windsurf o el kitesurf que involucran el viento como componente indispensable, las lagunas son las elegidas. También por quienes practican la pesca.
Algunas de las playas más cercanas a Porto Alegre son Xangri-La, Arroio Do Sal y Torres. Y si viajás con niños, puede que te interese visitar uno de los parques acuáticos más grandes de América Latina, Acqua Lokos. ¡Diversión asegurada!
