Después de ser madre no SOS la misma

Lactancia materna
LACTANCIA MATERNA ¿Sabías que después de tener un hijo las hormonas hacen que te transformes para siempre?

Ya durante el embarazo, tu cerebro sufre transformaciones que activan el instinto maternal. Esto va a hacer que puedas ponerte en segundo plano para proteger y cuidar a tus hijos durante un largo tiempo, sobre todo durante los primeros años, cuando debes ocuparte de su subsistencia.

Durante el primer trimestre, los niveles de oxitocina anuncian la fuerza del vínculo materno-filial.

Mientras transitaba uno de sus embarazos, la neurocientífica Elisabeth Meyer descubrió que los mareos que tenía eran una secuela del cambio que realiza gradualmente el cerebro para adaptarse a la maternidad y hacer frente a la gran exigencia que supone tener un hijo.

Después del parto se incrementa la materia gris en determinadas áreas del cerebro relacionadas con la planificación y la integración sensorial, la resistencia al estrés, la atención selectiva y algunos tipos de memoria.

Todas estas áreas están implicadas en el cuidado infantil por eso es bueno que tengas un parto respetado y te sientas contenida.


El comienzo de la lactancia: Volver a casa y la teta

Se te terminaron los días en la clínica, por fin llego la vuelta a casa, cosa difícil y feliz al mismo tiempo. Tu casa parece otra con tu bebé en brazos. Ahora, a enfrentarte con dar la teta.

En la clínica, tuviste la ayuda de una puericultora, enfermera o un pediatra, pero en tu casa, te esperan las visitas, otros hijos y familiares, pero estos primeros días son muy importantes para poder establecer la lactancia. Por eso, pedirle a todos los familiares y amigos que respeten los primeros días es lo mejor.

La lluvia de concejos, opiniones y tiempo dedicado a las visitas interfiere directamente sobre el éxito de la lactancia materna. ¿Sabes por qué? La lactancia materna es parte de nuestra sexualidad, es la continuación de la concepción- gestación-parto, por eso necesitamos tranquilidad, intimidad y tiempo para dedicar a conectarnos con nuestro bebe. Por esto, sugiero limitar las visitas hasta lograr establecer la lactancia, evitar el uso de mamaderas sin receta médica y el uso del chupete.

También, es muy importante contar con un grupo de sostén, madre, amigas familiares con buenas experiencias en lactancia.

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